martes, 9 de febrero de 2016

El tiempo ya no pasa por esta ciudad

Hace un viento
de lo más aterrador,
diariamente
quiero invocar su calor,
claramente
estoy tomando sus atajos,
desaparezco súbito
contemplando sus zapatos,
me presumo único
y todo lo que miro se desintegra
y todo vanamente me embelesa.
Lo presiento temeroso,
inocente todo lo padece,
me acaricio el rostro,
enfermedad mediática,
usa bloques de juguete
que no resisten nada.
El transporte viene
pero después no se va,
la gente se diluye,
escurre de aquí para allá,
son ecos de espejismos,
vacíos eufemismos,
publicidad perfecta,
mentira programada,
seguridad impuesta,
apariencia consumada,
pero la gente no es mala,
solo es vanidad
y el tiempo ya no pasa
por esta ciudad.

A mí, se me da olvidar

¿Qué día es hoy?
Dímelo pronto nena,
que pronto me voy,
dime qué día era.

Intúyelo de algún modo,
a veces lo olvido todo,
esa es mi magia,
Pero olvidarte, no se puede,
saboreando la nostalgia,
consume y nada le detiene.

Paso días orbitándote,
soñando la textura,
muero días olvidándote,
mendigando una cura.

Es el universo entero,
que no, se sabe alinear
a nuestro ritmo binaural,
en  la bóveda de acero,
mi sol y tu luna, flotan y se mezclan,
son colores oníricos,
rebotan lentamente, las estrellas,
hay sonidos lúdicos.

Dímelo, ya dímelo.

Ahora contestas al azar
Mujer, no me esperes,
A mí, se me da olvidar,
¿Tú sabrás qué día es?

lunes, 21 de diciembre de 2015

Especulación brillante

Belleza lúdica que desconcierta,
dulzura onírica que estremece,
anda y con cuidado se presenta
pues con cada movimiento fenece.

¿O podrá ser? Esa fragilidad intrigante
se nutre de vida un misterio alucinante
¿Cómo es que te convertiste en mi musa?
El cuadro, palabra de sonido magistral,
el instrumento, imagen presente y difusa,
descubrí el río, me bañe en el manantial,
instinto lleno de la sensación confusa,
tortura indefectible, descenso vertical.

Agradecido, si fue error bendito sea,
escribirlo sea su acierto, que ella lo vea,
inhalar y exhalar la feroz inspiración,
mentir, rogar, perdonar, buscar el índice,
deseo que no alcanza moderación,
riza, danza y canto, faltaba un ápice.

viernes, 13 de noviembre de 2015

Cazador y presa

Te metes en mi alimento y en mi bebida,
acaricias cada bello y cada poro sin medida,
aquí estás, volando entre las cortinas,
me tientas con tu sinfonía,
seductiva criminal que orbitas
sas hendiduras del alma mía,
pero me resisto hasta que me anhelas,
me someto hasta que te encadenas.

Eres la víctima del cazador,
la presa que impregna su olor,
que obsesiona al pensamiento
pero le hace desear que huya,
que convierte lucha en aislamiento
porque la tiene pero no es suya.

Mi hambriento corazón
no tiene ninguna otra razón,
en tus hebras me hundí,
por tu caprichosa belleza,
quiero alimentarme de ti,
por tu inigualable rareza,
me gusta mucho cuando vienes,
cuando te tengo y me tienes.

A pesar de mi falsedad
y de tu exageración,
mi ansiedad
y tu devoción,
quiero que seas mía,
llenar mi alma vacía.

Cuando estoy frente a mi presa,
se que es ella quien me acecha,
se cataliza la práctica y la experiencia,
yo ofrezco el deseo, ella la influencia,
me tienes hipnotizado,
me tienes desesperado,
hasta que te alejas y no vuelves,
no vuelves por un tiempo y más,
vuela lejos de mí y no vuelvas jamás,
hasta que en tu salvajismo regreses,
mi presa y mi adicción,
mi malestar y mi pasión.

Infatuación

He estado esperando lunas,
me he quedado en el frío solitario
suplicando bellezas algunas,
pensando lo que es primario,
esperando por el amanecer,
he abandonado la pertenencia y el sentido
ofreciendo lo que sé hacer
he ganado la experiencia que he querido
pero nada quema más que tu calor
y nada duele más que tu ausencia,
se  agota el ritmo y la elocuencia
y se borran tus sonidos y ese sabor,
he esperado horas por ti,
ya no sé lo que hago aquí.
Nuestra hora está por desvanecerse,
va muy rápido y no quiere detenerse,
va muy lento y ya no me interesa,
ilusión desesperada me confiesa,
se escurre, me derriba y me sostiene,
es la incertidumbre lo que se mantiene.

Ascesis

Esquivo balas bailando
Me alegro aligerándome
Pienso el pensamiento
Silencio al silencio.

Descanso al descanso
Esfuerzo el esfuerzo
Recuerdo el recuerdo
Siento el sentimiento.

Me inspiro insistiéndome
Atrapo anima andando
Y me mimetizo con la natura.

Canto rimas de amor
Rimo cantos de amor.

No olvidar

De recuerdos vive el hombre, de recuerdos nació y como un recuerdo quedara en el final de sus días. Todo es tiempo sin forma esperando a que le moldeemos.