jueves, 10 de agosto de 2017

Es imposible

Es un dolor ardiente
que estremece los huesos
y se roba las fuerzas,
que corre violento desde
el estómago hasta la boca,
mi cuerpo distingue su peso sobre la tierra
y mi alma flota libre sobre recuerdos.
¿A dónde se fue la calma?
Está fuera de mí.
Su rostro destella en mis ojos cada vez que parpadeo
y su nombre se queda en mis labios sin poder pronunciarlo,
todos los asuntos se desvanecen
dejando polvo en el suelo,
todo lo que veo se desenfoca y se aleja,
y cada respirar es una oración
que oprime y lastima el corazón.
Hay un signo por encima de mí,
esta es la certeza de mi esperanza,
el testimonio fiel de su promesa.
¿Por qué pues, estoy llorando?
Yo, que conozco la verdad y la vida,
Sé también, que es imposible ignorar este dolor.

sábado, 24 de junio de 2017

La voz de tu añoranza

Esta es la suerte
del que espera
frente a una ilusión
¿Es esta la fiebre,
es el dolor,
de estar lejos de ti?

Todas las promesas
arden en mi pecho
con miedo de no volver,
es un ardor que mata.

El viento sopla violento
y hay algo en la lluvia
que hipnotiza el despertar,
las gotas perforan la tierra,
alguien se va a ahogar
en esta espera.

No deja de llamarme en las mañanas
la voz que porta el viento a mi ventana.
Oh mi amor ¿Es esta la voz de tu añoranza,
un lamento que me reclama volver a ti?

Esta es la suerte
del que espera
frente a un recuerdo.
Ya no quiero esperar,
no puedo ser feliz así,
este es mi sendero hacia ti.

sábado, 27 de mayo de 2017

Pequeña ave

Pequeña ave de tono y sencillez,
ven y desdobla mi quietud,
trina en mis palabras,
cántame al oído
y entre los espacios
de llanto y nostalgia
dale luz a un instante.
¡Canción de gratitud y serenidad!

Tú que puedes,
húndete en el pasto,
báñate en la lluvia,
bésate con las flores,
marcha y busca tu alimento,
vaga en las montañas,
sube entre las nubes,
baja a los abismos,
juega entre los vientos
y con las corrientes
llega a los confines
donde las inquietudes
circulan como suspiros entre tus alas,
pues no comprendes
nada más allá de la luz de la mañana.

Te posas en las ramas, en los bordes y en las cimas
y ahí donde impera tu canto,
donde tus plumas resplandecen
y tú corazón se enzarza,
haces tú nido
y eres libre de volver y no volver,
hacer tuyos los caminos,
como yo lo hice ayer
como lo soñé esta mañana.

Por favor, no abandones mi casa
¿Harías tu nido aquí?
Acompáñame hasta el fin de mí tiempo,
si yo pudiera, escaparía colgado de tu ala,
pero estoy atado a esta tierra,
al igual que tú estoy desprotegido a su llamado,
no somos más que las hojas,
arrastradas por el viento
en espera de un descanso
y nuestros días valen lo mismo bajo el sol,
pero tú, pequeña ave de candor y luz,
naciste libre de estos desvelos,
tú no posees nada
y no necesitas saber,
si acaso hay un propósito,
o un antes o un después.

Si te quedaras aquí conmigo,
contemplaría y escribiría a tu libertad,
¡A tu candor y tu tono y sencillez!
… Pero te privaría de ser.
¿Quién soy yo para tomarte
y hacerte mía?
Oh pequeña ave, por favor vuelve,
cuando tu más lo desees.
Ya que sería preferible morir,
antes que arrebatarnos,
a ti de ser ave del cielo,
y a mí de ser hombre del mundo.

Pequeña ave
Artista: Karla Maike Robles Cano

sábado, 20 de mayo de 2017

Volver al hogar

Cuando parto, me pertenece el polvo de esta tierra, la brisa que mueve las cosas, los gritos ahogados y los besos que no serán, son mías las flores que brotan en la piel, la sensualidad del horizonte y la soledad de las calles, son míos los rayos de sol que se filtran por las ventanas y las esperanzas envueltas en confusos colores, mío es también, el sufrimiento y la agonía final, con todos sus clamores y angustias, las piedras de río y las risas comunes, poseo cada una de las voces del camino público y me apropio de las miradas que me persiguen, sé de todo cuanto ocultas con tu hermoso silencio y soy dueño de la luz que rodea mi alma. Soy un poeta brillante, soy un inconsciente, un ignorante, soberano celoso de todo lo que me pertenece y lo libero de esta tiranía, lo libero de este mundo y de mí mismo escribiendo sus cantos y sus rimas.

domingo, 23 de abril de 2017

Lux In Tenebris

¿Dónde estoy?
Me han tomado y me han puesto en soledad,
me han tomado y me han puesto en tinieblas,
estoy sediento y cansado,
tengo frío y mis ojos se apagan,
no sé si podré seguir así,
me han despojado de todo lo mío,
solo conservo en mis manos un cirio
y los nombres de mi amor,
obsequios de los días de vida.

Sin darme cuenta
se ha encendido mi cirio,
el fuego me da calor y aviva mis ojos,
acaricia mis manos y mi alma,
puedo volver a percibir mi rostro,
ahora, ya no estoy solo.

De pronto, surge un viento terrible
que amenaza con arrebatarme la luz,
tengo que mantenerla viva,
la cubro con mis manos,
como un padre que sufre protegiendo a su hijo
o un hombre que se aferra a su existencia,
en sus últimos momentos de lucidez.

Cuando el viento golpea la flama
dejándola al borde de la muerte,
ella baila y resurge con ímpetu,
tan solo para volver a ser golpeada,
nunca antes había sufrido así
y siento que las horas pasan.

Esta llama es como mi vida,
tan frágil que quiere apagarse,
tan potente que quiere trascender,
ahora todo está en calma,
el viento ha detenido su fuerza
dando tregua a mi dolor.

No puedo apartar la mirada
¿Qué hay en el danzar de la llama?
¿Qué hay al contemplar esta soledad?
Es un misterio que hipnotiza,
veo mil sombras
que corren entre mis manos,
veo la vida y veo la muerte
y cuando llega el final de esta hora,
cuando penetro al fin en esta meditación,
te veo a ti, triunfante
y me deslumbras con tu gloria.

Esta es la noche,
la noche que prometiste,
cúbreme en tu luz
como un manto,
ya no tengo sed
y tampoco estoy cansado,
porque esta es la luz,
esta es la paz y el bien.

jueves, 13 de abril de 2017

Cuerpos silvestres

No me encontrarán
con sus gestos falsos,
me refugiaré
en las voces y en los astros
de la inconsolable noche,
noche de tristes poemas.

No me adornarán
con sus prendas de barro,
yo me fundiré
en las piedras y los llantos
de mi hermana tierra,
tierra de cantos andantes.

No me atarán
a la sombra de un arma,
mientras sus ojos brillen
sus pies me guíen
yo estaré libre,
libre de ensueños y vanidades.

Y me mirarán
entre los cuerpos silvestres,
me renovaré
y cada acto desde ahora
será un acto de amor,
amor al hombre y a la vida.

lunes, 27 de marzo de 2017

Ágata azul

Llegará un momento en este mundo,
cuando las flores danzantes de los campos,
olvidadas, muertas ya en lo profundo,
permanezcan en torpes retumbos mudos
de la mujer y el hombre desvanecido,
dolientes afligidos de romanticismo,
aquellas montañas antes majestuosas,
no albergarán más pasiones vigorosas,
aquellos glaciares, signo de ancestral letargo,
quedará todo reducido a lágrimas de espanto
y aún en ese tiempo mi alma brillará
con un resplandor sutil y cálido
y aún con todo este pesar árido,
entre los latidos de mis versos nacerá,
la forma y color de nuestro beso,
el más íntimo y verdadero rezo,
ahora sé cuál será para mí la última noche,
aquella será la última estela de mi resplandor,
se extinguirá cuando te olvides mi nombre,
pues ya no podré seguir viviendo sin tu amor.